Nadie sabe su nombre hasta que se lo dicen
El silencio es el desierto que no existe. sonido y silencio sesean contundentes
Elijo el silencio
Sino qué es el vacío, ¿ Mi voz extraña ?
como la luz que es todo
el sonido
de tu nombre
—Horizonte de sucesos—
Como el chorro de agua
La luz y sus gotas
de sonido, soto de vida
sobrecalentamiento
Berbén de silencio
Mis lágrimas
hasta el silencio
mis lágrimas en este encierro
inconexo,
en las sustancias y los nombres
en la entropía del momento
En la gota
en este petit-big-bang
en la estrella,
en el mar
En la estrella de mar.
Saber que no soy es el silencio
y el silencio es la voz
la memoria,
El Rhône que implosiona.
Y sobre el acepto la explosión del silencio,
Acepto la verdad que del silencio se escapa.
Singularidad, luz negra, fruto de la oscuridad del ecume cósmico de esta materia negra.
(É.L.)